¿Por qué, si no eres de Cienfuegos tienes en el banner del blog una foto de esa provincia? La pregunta, a modo de comentario, me la hicieron recientemente. Pero no ha sido la primera vez que alguien duda. Me han preguntado, sobre todo, cienfuegueros dentro y fuera de Cuba, porque piensan que les tomo el pelo o que no sé de geografías.
No, no soy de Cienfuegos, es cierto. Mi ciudad no la fundaron los franceses, no tiene calles anchas. En mi ciudad no hay mar. Pero desde que decidí lanzar mis botellas, pensé llevarlas al Muelle Real. A fin de cuentas todo surgió por una misma persona y razón, entonces el nombre del blog, el banner, todo debía relacionarse.
El Muelle Real une dos cosas que adoro: el mar y los parques. Ahí mismo, en un solo lugar, tengo ambos.
Cada año cuando llego a Cienfuegos lo primero que hago, luego de dejar la pesada mochila y antes de sacudirme el polvo del camino, es ir a sentarme al Mulle Real. Incluso otras veces, cuando he ido por unas horas, también me doy al ritual del pedazo de mar que más me gusta.
En el Muelle Real he hecho mis mejores confesiones, he conversado largo, me he enamorado. Es por eso que quiero mirarlo siempre que abro el blog, cada vez que decido lanzar estas botellas digitales.
Lo añoro, con ese mar tan azul, los faroles encendidos en las noches, el asfalto por donde se despidió de Cuba para siempre Julio Antonio Mella, el banco donde me siento a pensar siempre que voy a Cienfuegos: el penúltimo banco del lado izquierdo. Y todo, todo eso necesito tenerlo para escribir en este blog, aunque solo sea de manera virtual. Aunque yo no viva en Cienfuegos.
Botellas al mar 
«Cienfuegos es la ciudad que más me gusta a mí». Beny Moré
(Y parece que a tí también)
Y a mí también me gusta mucho, pero Trinidad me gusta más.
ah, sí, como el Benny: Cienguegos es la ciudad que más me gusta a mí…♪
Me encanta, estar en ese Muelle Real… lo necesito!
Trinidad..bueno, a Trinidad iré pronto, este mes… si Dios, Carlos y Galinka quieren.. 😀
Niña… el mar, desde cualquier lugar, enamora. y visto desde un muelle… bueno, ya eso es demasiado.
Cuando vengas a la Habana te voy a llevar al Morro, para que veas el mar desde la altura.
qué bueno!!!
vas a compartir tu pedacito de mar? 😀
El Morro me encanta, y el malecón… uf, qué nostalgia por el mar tengo ahora mismo!
Comparto… si es con una botellera el mar se siente mejor. Pero no te puedes olvidar de avisarme.
PS: si es pronto tu visita (en menos de 15 días) también comparto Nutella.
Dan ganas, en verdad dan ganas de estar en el Muelle Real, en Cienfuegos, dan ganas de verte en es banca y ver como te enamoras y ver como arrojas la botella al mar, dan ganas tantas pasiones y uno tan lejano, de Cienfuegos, del muelle, de ti y de las cercanías digitales, dan ganas querida…
Gracias…
Bueno, a mí de verdad que me dan ganas… de estar en ese Muelle Real ahora mismo! Es mucho lo que me tranquilizo, pienso y me confieso en ese lugar… Ojalá puedas conocerlo algún día, es un lugar hermoso!
es algo que tendré en mi lista de lugres a los que me gustaría ir….y será el primero en la lista
Mi Leydi, al Muelle llegué hace varios años. Y aunque yo soy de bien adentro, todo lo mediterráneo que se puede ser en Cuba; aunque no me he enamorado precisamente en ese muelle (sí en otros viejos y desvaídos de la costa norte) vivo enamorado del mar.
!Qué bueno si es este mar (la razón, la persona) te hacen escribir.
Besos de uno de tus Carlos.
Sí, es un lugar adorable. Yo me he enamorado de y en el Muelle Real, estar rodeada de mar me encanta!
Ya no sé, sí, ya recuerdo, la primera vez que estuve fue en el 2009. Desde entonces siempre que llego a Cienfuegos corro hacia allá, me siento un rato -aunque el sol esté en su justo medio- y me dejo ganar por esa vista que incluye mar a la derecha, izquierda y al frente! 🙂
Muy pronto conocerás el azul de mis playas trinitarias que, si bien no son tan fabulosas como este parque de la ciudad que más me gusta a mí, como diría el Beny, es un lugar estupendo para lanzar tus botellas si algún día no pudieras ir al Muelle Real
Gracias, Carlos.
Qué bien, tengo a dos de mis Carlos en mi blog hoy!!
A Trinidad llegaré, ya verás, y lanzaré botellas desde allá, y traeré otras para compartir. Un beso, se te quiere.
yo.. 😀
Leydi: En lo que a mí respecta, puedo atestiguar que allí has conversado largo (conmigo). Y sé también cuánto aprecias ese muelle. El día que se lo lleven de Cienfuegos la Policiía debe buscar en tu casa.
Es cierto, cuando se pierda el Muelle, cuando me lo robe…ups, me delaté!! 😀
Enrique, la tarde que desafiamos el sol y fuimos con Jasán a caminar al Muelle, ya yo haba ido antes, ese mismo día… Jasán, tú y yo pudimos recorrer parte de Cienfuegos y terminar nuestra caminata en el Muelle Real, pero la vez que he conversado largo, al menos la que más he conversado, fue una tarde-noche, y por poquito llega la madrugada…
Ah, sí. Seguro irás a las playas de Trinidad, pero no podrás faltar a Guaracabuya el día que marca la mitad del año. El mar está muy lejos, pero si hace falta me robo un pedacito y te lo pongo allá, bajo la misma Ceiba que marca, también, la mitad de Cuba.
De todas maneras, a ti te llevarán un regalo de mar, en ruedas.
Besos.
Ah, ya sé, me has invitado a estar en el centro de Cuba el día central del a;o a contar lo central de mi vida… son tantas cosas centrales!!
Gracias… y en cuanto a la sorpresa de Mileyda, ya estoy curiosa…qué será esa sorpresa sobre ruedas, eh??
a Trinidad voy antes, supongo, a Guaracabulla no faltaré el día 1ro de julio, no te preocupes.
FELICIDADES!!!!!
😀
gracias!!
Como ya te dije ayer por feisbu estás en deuda conmigo hasta que pongas unas buenas fotos de los alrededores de ese muelle. Me mata la curiosidad por saber que hay en el otro lado, no de la luna, sino de ese precioso parquemuelle… jajaja, un beso
Ah, está bien, pero de todas formas te lo puedo describir y tú hacer uso de tu imaginación, miras mi banner y con un poco, ya sabrás…
El Muelle Real es precioso… mar por todas partes… A la izquierda se ve el malecón, a la derecha unos barcos anclados, al frente mar, mucho mar… y detrás…bueno, detrás queda la calle, sino cómo se supone que llegues, 😀
De todas formas te debo las fotos de toda la vista.
😉
Espero que lo de Trinidad se de, pero que carlos no te acapare, que en trinidad te sobran los amigos. un beso y esperamos que lances una de tus botellas de aca de nuestras playas
Sí, yo creo que sí me va a acaparar…jaja De todas formas también quiero pasar por la emisora a ver a dos amigas. Y tú estarás de prácticas… puede que te vea.
Un abrazo, L
bueno, ya leydi lo dijo…… no fui yo!!!!!!!!!, para que después no digan que soy «pícú» jajajajajaja. Leydi: soy muy egoísta????
jajaja, no, mi Carli, cómo que egoísta tú, si quieres compartir tu Trinidad conmigo??? 😀
No, egoísta no, tremendo gran amigo sí!!
🙂 Te quiero.
que bueno, ya veo que se acerca el momento de compartir nuestro mar, nadie sabe las sorpresas que te pueda deparar esa visita, quizás le gane al muelle real, quizás sientas también necesidad de regresar a él, besos
Quién sabe…
todo es posible, ya me han dicho que esos mares son también divinos. Ustedes son los arriesgados, porque… y si después quiero llevarme el mar en los ojos?
voy a decir un sacrilegio: nunca he estado allí, ni sé dónde está siquiera… es más, ni sabía que en la bella bahía cienfueguera había existía un lugar así, en fin, tarea pendiente…
sí, te lo recomiendo, es un sitio asombroso. Cuando digo que me enamoré de -y en- él. Cuando vayas, ya verás que regresas.
Hola Leidy, estuve por cfuegos hace unos días, y ayer solo pasé viniendo de topes (tremenda belleza la de alla arriba, y tambien desde el mirador se ve el «mar trinitario»), pero lamentablemente ni hace unos días ni ayer pude llegarme al muelle real..tuve que entrar a tu blog otra vez para refrescar la vista.
un saludo
gracias!!
gracias siempre por regresar a mi blog para ver el Muelle Real (lo confieso: yo también entro a mi blog por la necesidad de mirarlo)
Qué buen recorrido hiciste!! Gracias por terminarlo en este blog… un abrazo.
Como camarero, tampoco he estado allí, aunque suene a sacrilegio. Si Dios quiere y la suerte y el festival de crónicas, iré en ¿septiembre?¿octubre? cuándo es el mes, tú que sabes… mira, dame el norte de lo que hay que hacer para clasificar en concurso y a lo mejor nos sentamos en el penúltimo banco a mano izquierda y tú nos presentas a ese mar y a mí. Besitos.
bueno, Tunie, el penúltimo banco del lado izquiero está reservado para mí, tú tendrás que hacerte de otro, ese es mío, mío, mío, porque ahí comencé una buena historia.
El encuentro de crónicas debe ser en noviembre. En cuanto tenga la convocatoria te la envío… podrías hasta ir con Enrique!!
¿te imaginas? 🙂
Un abrazo.